10 errores que cometes a la hora de plantar y 10 consejos para solucionarlos
1. Semillas Viejas o de Baja Calidad
Las semillas de cannabis pierden su viabilidad con el tiempo, especialmente si se almacenan en malas condiciones. Incluso en el almacenamiento ideal —en lugares frescos, oscuros y secos— las semillas se degradan gradualmente.
¿Cómo reconocer una mala semilla?
- Tiene la cáscara muy dura, muy gruesa. Seguramente es una semilla vieja; una cáscara dura y gruesa que dificulta que el brote la atraviese, retrasando o impidiendo la germinación.
- Está descolorida, agrietada o seca, esto es una señal exterior de que el interior está en mal estado.
- No pesa, da sensación de estar hueca.
- La calidad también es clave; las semillas de baja calidad suelen producir plantas débiles o no germinan.
¿Cómo reconocer una buena semilla?
Las semillas frescas deben tener una cáscara dura y un color oscuro, con un ligero brillo.
CONSEJO 1. Compra semillas de proveedores confiables como Buddha Seeds que las manejan y almacenan adecuadamente. Invierte en semillas de cannabis buena calidad y frescas, así aumentarás las posibilidades de éxito en la germinación y desarrollo de plantas fuertes.
2. Nivel de Humedad Incorrecto
Las semillas de cannabis necesitan humedad controlada para germinar. Las semillas demasiado húmedas o demasiado secas no germinarán y no crecerá la planta. Mantener un nivel de humedad relativa del 60-80% favorece la germinación. Si quieres conseguir una germinación uniforme evita extremos de humedad
¿Cómo afecta el agua a las semillas?
- Demasiada agua . Las semillas encharcadas corren riesgo de pudrirse.
- Falta de agua mientras que las secas permanecen inactivas.
¿Cuánta agua necesitan las semillas de cannabis?
El agua justa para lograr el equilibrio adecuado. Mantén las semillas en un medio húmedo, no empapado, como toallas de papel o suelo ligeramente humedecidos.
CONSEJO 2. La constancia es clave: revisa regularmente para mantener una humedad uniforme sin excederte. A partir de la segunda semana puedes añadir fertilizante líquido mineral a base de NPK al agua para asegurar el enraizado. También puedes cubrir los recipientes con plástico, eso ayuda a retener la humedad, pero permite circulación de aire para evitar moho.
3. Temperatura Inadecuada
La temperatura es clave en la germinación de semillas de cannabis, ya que son sensibles a los extremos. Las semillas de cannabis germinan mejor a temperaturas entre 21-29°C (70–85°F). Las temperaturas fuera de este rango inhiben los procesos enzimáticos esenciales para la germinación.
-Si hace demasiado frío, las semillas se quedan inactivas, no germinan.
-Si hace mucho calor, pueden secarse o morir.
CONSEJO 3. En ambientes fríos, una almohadilla térmica ayuda a mantener la calidez ideal. En lugares calurosos, coloca las semillas en un espacio fresco o usa ventiladores para bajar la temperatura. Puedes controlar la temperatura con un termómetro en caso de duda.
4. Oscuridad Insuficiente
Las semillas de cannabis prefieren la oscuridad para germinar, ya que la luz puede interrumpir las primeras etapas de la germinación. En la naturaleza, las semillas están bajo tierra, protegidas de la luz hasta que desarrollan raíces y emergen. Si están expuestas a la luz demasiado pronto, pueden no germinar o desarrollarse con problemas.
¿Cómo protejo de la luz las semillas recién plantadas?
- Tras plantar las semillas en maceta cúbrelas ligeramente con tierra y colócalas en un espacio oscuro hasta que germinen.
- -Si has germinado las semillas en toallas de papel, colócalas en un cajón o armario lejos de luz directa o artificial.
- Para las semillas en tierra, una cubierta ligera (plástico negro, por ejemplo) ayuda a bloquear la luz.
CONSEJO 4 Respeta su necesidad de oscuridad, imita las condiciones naturales que favorecen una germinación exitosa, ponlas en un sitio oscuro o tápalas.
5. Plantación Demasiado Profunda
Las semillas deben plantarse a la profundidad correcta para asegurar que puedan brotar con éxito. Si se plantan demasiado profundo, el brote puede quedarse sin energía antes de alcanzar la superficie, fallando en germinar.
¿A qué profundidad hay que plantar la semilla de cannabis?
- La profundidad ideal es 1-2 cm. Esto permite al brote acceder a la humedad y nutrientes, así crecerá y saldrá a la superficie.
- Menos de 1 cm es demasiado cerca de la superficie, pueden secarse, cualquier cosa de la superficie puede agredirlas.
CONSEJO 5 Para plantar a la profundidad correcta, haz un agujero pequeño, coloca la semilla y cúbrela ligeramente con tierra. Evita compactar el suelo encima, ya que esto aumenta la resistencia.
6. Suelo Compactado
Un suelo denso y compactado puede atrapar el brote y evitar que las semillas de cannabis lleguen a la superficie. Las semillas de cannabis crecen mejor en un medio ligero y aireado que permita buena circulación de aire y drenaje.
- Inconvenientes de un suelo compactado: restringe el crecimiento de raíces, la circulación de aire y la distribución de humedad, todos esenciales para la germinación.
- Ventajas de un suelo suelto para cultivar semillas de cannabis: les damos espacio para brotar, facilitamos la aireación y humedad necesarias.
CONSEJO 6 Usa una mezcla para germinar las semillas de alta calidad o un suelo bien aireado diseñado para cannabis. Lo básico es utilizar sustratos con perlita para aumentar la aireación, facilitando la salida del brote. Para atajar los problemas de compactación y drenaje, además de asegurar la transferencia de nutrientes a la semilla, lo mejor es utilizar sustratos minerales combinados con fibra de coco, turba, harina de lava, guano de murciélago y arcilla expandida.
7. Nivel de pH Incorrecto
Las semillas de cannabis requieren un rango de pH específico para germinar y crecer bien, generalmente entre 5.5 y 6.5 en suelo. Si el pH es demasiado alto (alcalino) o bajo (ácido), la semilla no puede absorber nutrientes adecuadamente, dificultando la germinación y el desarrollo de raíces.
¿Cómo puedo saber el pH del suelo o el agua? Tendrás que usar un medidor de pH o tiras de prueba.
¿Cómo se ajusta el pH? Existen soluciones para regular el pH, tanto caseras como profesionales, todas requieren revisiones para ajustar el punto adecuado.
CONSEJO 7: Si el pH es demasiado ácido y quieres elevarlo, puedes utilizar bicarbonato de sodio, cal agrícola o ceniza de madera. También puedes subir el PH utilizando abonos alcalinos cuando la planta empiece a crecer.
Para Bajar el pH puedes utilizar vinagre de manzana, zumo de limón, ácido cítrico, turba o humus de lombriz.
8. Medio de Cultivo Contaminado
Un medio de cultivo contaminado expone las semillas de cannabis a patógenos, hongos o plagas que pueden matarlas antes de brotar.
¿Qué sustratos no debo utilizar?
- Suelos húmedos y sin esterilizar: se habrá desarrollado moho, que daña las semillas durante la germinación.
- Suelos viejos o descuidados: contendrán organismos no deseados que pueden matar las semillas.
- Suelos que has regado con agua procedente de aparatos de aire acondicionado, puede portar patógenos como el fusarium.
CONSEJO 8 Usa medios de cultivo frescos y estériles para evitar la contaminación. Si quieres usar un sustrato en el que ya cultivaste puedes removerlo y tamizarlo para eliminar raíces antiguas, o bien higienizarlo al horno, microondas o con peróxido de hidrógeno. No olvides devolver la vida microbiana y los nutrientes al suelo para que tus semillas germinen añadiendolos de nuevo.
9. Genética Deficiente
No todas las semillas de cannabis son iguales, y la genética deficiente puede llevar a fallos en la germinación o plantas débiles. Optar por semillas de genética estable y probada maximiza las probabilidades de éxito.
Los bancos de semillas confiables trabajan la calidad genética de la semilla y siguen controles de calidad permanentes para ofrecer semillas con altos índices de germinación y rasgos deseables.
CONSEJO 9 Invertir en genética de alta calidad aumenta las posibilidades de obtener plantas sanas y robustas que germinarán sin problemas. Investiga la reputación del banco de semillas y revisa las opiniones de otros usuarios para evaluar la calidad.
10. Daño por Manipulación
Las semillas de cannabis son delicadas y pueden dañarse por una manipulación inadecuada. Manejarlas con cuidado ayuda a mantener la integridad de la semilla, fomentando una germinación y crecimiento exitosos.
¿Cómo no manipular las semillas? Manipularlas con brusquedad, apretarlas o presionarlas demasiado puede romper su cáscara protectora, dañando el embrión y reduciendo las posibilidades de germinación.
¿Cómo manejar las semillas? Es importante manipular las semillas con suavidad, especialmente al colocarlas en el sustrato o en el medio de cultivo. Durante la plantación, evita presionar demasiado la semilla, ya que esto puede dañarla o dificultar la germinación.
CONSEJO 10 Usa manos limpias y secas o pinzas estériles para manipularlas y aplica solo una presión ligera al colocarlas en el suelo.